Me instalé en el Monte y cesaron los cuidados:
ya no ocupan mi mente pensamientos vanos;
más libre que las rocas donde inscribo versos,
me doy, cual barco sin amarras, a los hados.

Hanshan

lunes, 30 de junio de 2014

Este espacio tan mio


Tantas poesías de amor, tantos versos enamorada,
mas hoy en mi soledad mirando por mi ventana,
como paso tanto tiempo y sigo flotando en la nada
de este vació que cada noche me acompaña.

Donde esta el amor que me prometieron un día,
donde están esos versos que ilusionada escribía,
hoy tan solo son una flor marchita en mi ventana
que me roba las esperanzas para volver a amar.

Un cielo sin estrellas que miro y me mira
riéndose a escondidas de mi desdichada vida,
donde los sueños son solo espejismos que flotan
alrededor de mis lágrimas y de mis risas.

Sigo siendo la misma y soy tan distinta a la vez,
quizás he madurado y me siento tan ignorante también,
el tiempo siempre se ocupa de cobrarnos factura
y yo no se cuantas veces he pagado por errores de ayer.

Ni cuantas veces he escrito estas mismas palabras
las que termino borrandolas una y otra vez,
mas hoy son mas mías que nunca y al leerlas
siento que vuelvo a encontrar mi lugar.

2 comentarios:

Mª Teresa Martín González dijo...

El amor nos provoca eso, deseos, esperanzas, ilusión. Cuando no alcanza nuestras expectativas nos defrauda y a veces nos llena de dolor. Pero siempre ansiamos volver a tener amor, aún con el riesgo de volver a abrir heridas, porque la balanza siempre se decanta por las cosas buenas.

He estado bastante alejada del mundo blogger y hace tiempo que no leo nada, pero es un placer volver a leer lo que escribes.

Un abrazo.

hanna dijo...

Sigue soñando y reflejando bellos sentimientos. Besos